Una mujer reza y llora afuera del velatorio donde se encuentran los ataúdes de una familia, uno es una caja pequeña de color blanco, de esas que no deberían diseñarse, el silencio emula la magnitud de la tragedia de los García.

La señora abraza a su hijo, mientras los féretros desfilan uno a uno, son colocados en las carrozas para salir en caravana al panteón donde les darán el último adiós, algunos aplauden, otros se persignan junto a ellos..

Apenas y hubo tiempo para despedirse de Carolina, Margarita, Karla, Hilda, Violeta, Fidel también de los menores de edad, José Manuel, Guadalupe como César el duelo fue tan rápido que unos no dimensionan el vacío.

La gente se reunió antes de ser sepultados, hubo misa, las flores y fotografías de cada víctima adornan los sarcófagos, las lágrimas invaden los rostros al ver salir la tumba cubierta con tela, es la de un niño por el tamaño.

Ellos, regresaban de vacacionar del puerto de Acapulco, cuando un tráiler sin frenos embistió la Urvan en la que viajaban en el kilómetro 122 de la autopista del Sol en el puente de Solidaridad, la madrugada del martes.

Eran comerciantes de flores, originarios de la colonia El Seminario en Toluca, una de las zonas más populares de la ciudad, que hoy está de luto, conocidos y amigos se unieron a la pena, acompañando el cortejo fúnebre.

El camposanto de San Pedro La Hortaliza en el municipio de Almoloya de Juárez será el espacio del descanso de los Garcia Paulino.

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