A través de las distintas diligencias que se han realizado en el inmueble del feminicida serial confeso, Andrés Filomeno «N», ubicado en la colonia Lomas de San Miguel de Atizapán de Zaragoza, personal de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) ha podido recuperar tres mil 787 restos óseos, los cuales aparentemente pertenecen a 17 personas distintas.

A través de una tarjeta informativa, la FGJEM informó que, desde el pasado 17 de mayo a la fecha, se han excavado tres zonas de trabajo: la primera consistente en una parte del patio y la cocina con tapanco de madera y láminas, la cual ya fue concluida; la segunda correspondiente a la habitación principal y un sótano, de aproximadamente 30 metros cuadrados, y la tercera, que abarca el resto del patio y dos baños; con una extensión de alrededor de 68 metros cuadrados, además de que se iniciará una cuarta zona que incluye tres habitaciones que eran utilizadas como viviendas y una accesoria, en la que estaba instalado un consultorio dental.

«En el lugar trabajan policías de investigación, ministerios públicos, así como especialistas antropólogos y arqueólogos forenses, genetistas, peritos en criminalística, odontología, medicina legal y fotografía, además de Bomberos, policías municipales y personal del Ayuntamiento de Atizapán», indicó.

Como parte de estos trabajos, se han podido recuperar tres mil 787 restos óseos, los cuales se encuentran en una etapa de estudio llamada lateralización, que consiste en la limpieza minuciosa de cada uno de ellos, para luego, identificar a qué parte del cuerpo corresponden y colocarlos en posición anatómica, para hacer posible que se determine un aproximado del número de víctimas. Este ejercicio, ha permitido que se identifiquen 17 posibles víctimas del feminicida serial, preso en el Penal de Barrientos.

«Una vez que concluya el proceso de lateralización, los peritos expertos en genética iniciarán el proceso de extracción, purificación, cuantificación, amplificación y tipificación, para la obtención de un perfil genético y el electroferograma correspondiente a las muestras de los restos óseos. En este punto se debe determinar si los restos óseos encontrados, se encuentran en condiciones óptimas de conservación para extraer el material genético necesario que permita realizar una posterior confronta», explicó la FGJEM.

En estas excavaciones, también se han hallado diversos artículos como 29 fotografías instantáneas, 44 fotografías medianas, 17 infantiles y una tamaño pasaporte; dos básculas, un cuchillo, un machete, ocho libros de diversos tamaños, cinco cuadernos de diversos tamaños, 28 videocasetes de formato 8mm, 25 videocasetes de formato VHS, ocho teléfonos celulares,12 chips para teléfono celular, ocho barnices para uñas, cinco pulseras, seis collares, cuatro pares de aretes, tres anillos, dos carteras de mujer y nueve juegos de llaves diversas.

«En este momento de la investigación, aún no es posible identificar, de manera científica, a ninguna de las posibles víctimas. Sin embargo, a partir de los avances en la indagatoria, la Fiscalía Central para Delitos Vinculados a la Violencia de Género, en coordinación con la Comisión de Atención a Víctimas del Estado de México (CEAVEM) ha entrado en contacto con seis familias, a quienes, además de ofrecer la atención psicológica correspondiente, se les ha informado de los avances y alcances que hasta el momento tiene esta investigación», puntualizó.

Además, la Unidad de Análisis y Contexto de la Fiscalía Central de Delitos Vinculados a la Violencia de Género ha analizado y recabado aproximadamente 600 carpetas de investigación y averiguaciones previas, desde 1990 a la fecha, las cuales corresponden a personas desaparecidas, para encontrar datos e indicios que pudieran relacionar alguna de esas indagatorias, con la investigación en curso.

Al tiempo, en que la Fiscalía mexiquense se ha dado a la tarea de contactar y coordinar acciones con diversos colectivos de víctimas, a los cuales se le han mostrado los indicios encontrados, con el objetivo de obtener información que pudiera robustecer esta indagatoria, en caso de que sean reconocidos algunos de estos artículos.

Agregó que aún no hay una fecha programada para concluir los trabajos de excavación, lateralización y análisis genético, ya que, en el primer caso, incluso se ha estudiado la posibilidad de derrumbar el inmueble completo, si es que en algún momento pudiera presentarse algún riesgo para el personal que labora en el sitio.

Información Jesús Hernández